Unos meses después del lavado de cara de 2019, se lanzará el BMW X1 xDrive25e híbrido enchufable como la incorporación más interesante a la gama de motores. La producción del SUV PHEV comenzará en marzo de 2020, y los primeros clientes recibirán el X1 con los dos motores poco después. A finales de 2019, la flota electrificada del Grupo BMW contará ya con 12 modelos, y la expansión continuará de forma constante el año siguiente. ¿Buscas coches de ocasión? Los mejores coches segunda mano en Crestanevada.
El BMW X1 xDrive25e está propulsado por un motor de gasolina de 125 CV delante y un motor eléctrico de 95 CV detrás. El motor de combustión ofrece hasta 220 Newton metro de par motor, mientras que el motor eléctrico puede aportar hasta 165 Newton metro casi sin retardo. La interacción de los dos motores da como resultado una tracción a las cuatro ruedas cuya distribución de potencia se ajusta en función de la situación de conducción, aunque es evidente que el motor de gasolina siempre impulsa sólo las ruedas delanteras y el motor eléctrico sólo las traseras.
La batería de iones de litio del BMW X1 xDrive25e tiene un contenido bruto de energía de 9,7 kWh, suficiente para una autonomía eléctrica de más de 50 kilómetros. El conductor puede elegir entre los tres modos de conducción específicos PHEV Auto eDrive, Max eDrive y Save Battery para adaptar de forma óptima la estrategia de utilización de las baterías disponibles a las necesidades del momento.
En términos puramente visuales, el híbrido enchufable sólo se distinguirá de los modelos de propulsión convencional por el faldón adicional en la aleta delantera. Aparte de la aleta adicional en el lateral y las letras del modelo en la parte trasera, BMW se abstendrá de diferenciar el X1 xDrive25e.
Mientras que la versión larga BMW X1 xDrive25Le estaba reservada exclusivamente al mercado chino, la «corta» X1 xDrive25e se dirige explícitamente a los clientes de Europa. Junto con el 225xe Active Tourer, representa la entrada en la flota de híbridos enchufables del Grupo BMW y, por tanto, podría contribuir a un aumento significativo de las ventas de vehículos con propulsión electrificada.