KTM está experimentando el mejor crecimiento de ventas entre los fabricantes europeos. Gracias a su alianza con la india Bajaj, la marca austriaca ofrece productos atractivos sin disparar sus precios. Conoce una 125 excepcional. Bajaj produce nada menos que tres millones (¡!) de vehículos de dos ruedas al año, una cantidad que garantiza un cierto nivel de calidad. Al emplear una mano de obra evidentemente más barata que la europea, el fabricante indio puede abaratar los costes de producción de KTM y, cabe señalar, también colabora con Kawasaki. Las Duke 200 y 125, de las que deriva la RC, son los primeros frutos de esta colaboración indo-austriaca, que nace bajo los mejores auspicios ya que la Duke 125 es un superventas en su categoría. Y no hay que preocuparse por el producto acabado, ya que cada moto producida en India es validada en Mattighofen antes de ser enviada a los concesionarios.
Tomemos el examen estático, por ejemplo; los detalles favorecedores en el acabado o el mecanizado de algunas piezas (basculante, mecanismo tensor de la cadena, corona de la horquilla, …) nos recuerdan a una máquina con una cilindrada mucho mayor. El diseño general es aún más llamativo que el de la ya muy lograda YZF R125: todo en la KTM tiene un marcado carácter agresivo y nos recuerda a la escultural RC8R, hasta el piloto trasero.
Y luego están las originalidades propias que una vez más distinguen a la KTM. El bastidor de acero con recubrimiento epoxi naranja contribuye en gran medida a su personalidad estética, y qué decir de la elaborada burbuja que se extiende por los laterales de la cabeza de la horquilla. Eso sí, ésta se lo pondrá muy difícil a los fabricantes a la hora de diseñar una burbuja adaptable… Si no es unánime, el frontal también es muy personal; si no bello, al menos es singular. Por último, la sorpresa viene del asiento trasero que todo el mundo cree que es un respaldo. Bien hecho: es bonito, deportivo y a la vez funcional y cómodo, porque un posible pasajero no se quejará de ello, que lo sepas. Y el sistema de escape, ¿lo has visto? No, claro que no, porque está hábilmente integrado en el carenado inferior: ¡sublime!
Cuando te pones a los mandos, es lo mismo; puedes sentir que la RC200 y la 390 son del mismo molde. Ganancia inmediata: todas las tallas caben en la RC125, lo hemos experimentado con pilotos de 1m64 a 1m95. Un indudable punto a favor. El cuadro halagüeño continúa con una instrumentación imbatible en la categoría; puedes encontrar a granel: marcha engranada, consumo medio y velocidad, temperatura del motor, indicador de combustible, autonomía restante, reloj, indicador de mantenimiento. En resumen, es abundante y bastante precisa, lo que no estropea nada. Y las guindas de este apetitoso pastel son los mandos iluminados -imprescindibles para quienes circulan con frecuencia de noche- y, sobre todo, la presencia de un ABS desconectable que da una bofetada tecnológica a la competencia. Por cierto, no te preguntes de dónde viene la pinza de freno delantera BYBRE, ¡sólo significa By Brembo! ¿Quieres y deseas una moto de ocasión a un precio increíble? No lo dudes… encuéntrala en moto segunda mano Crestanevada.