¿Qué funcionalidades necesita de su ISV?
Piense críticamente en lo que busca de un proveedor externo. ¿Hasta qué punto se ajusta a las necesidades de su empresa no sólo la aplicación, sino también el ISV? ¿Busca una solución específica para ampliar su sistema ERP o, si le preocupan los costes, cuáles son sus parámetros? ¿Cuánta funcionalidad necesita realmente?
Al igual que habría hecho al seleccionar su ERP, se recomienda elaborar una solicitud de propuesta (RFP) o, como mínimo, un documento de requisitos sobre la funcionalidad que necesita y cuáles son sus objetivos para esta aplicación. Es importante dedicar tiempo a definir lo que se necesita de la aplicación, en lugar de arriesgarse a pagar de más por algo que podría convertirse en un producto obsoleto, señala Galdón Software.
Asegúrese de que sus requisitos no son sólo funcionales, sino que también tienen en cuenta al propio proveedor. ¿Cuánto tiempo lleva el proveedor en el mercado y cuántos empleados tiene? ¿Cuántos clientes tiene? ¿Dispone o no de un programa de distribuidores? ¿Dispone de una hoja de ruta adecuada, está desarrollando funcionalidades e invierte en el producto? Es fácil pasar por alto estos requisitos, pero es importante conocer su procedencia y trayectoria y saber si será una asociación sostenible a largo plazo.
Ahora, verifica el trabajo de integración
Es importante verificar si la integración ya está en marcha y, de no ser así, quién será responsable de ese proceso. Tenga en cuenta que muchos proveedores de ERP de buena reputación insistirán en una integración certificada de su ISV para formar parte de su programa formal. Esto es algo que debe saber antes de comprometerse con cualquier ISV.