Cuando uno va a una tienda a comprar un refresco, espera poder conseguirlo en lata o botella. Pero cuando el dueño de la tienda compra refrescos a un proveedor, los pide en paquetes o cajas. Se trata del mismo artículo, un refresco, pero las unidades de medida son diferentes. El hecho de que muchos artículos se compren y vendan en otras unidades es una de esas cosas en las que no se suele pensar, a menos que se esté en un negocio en el que sea necesario. Por eso es tan importante que un sistema ERP pueda manejar diferentes unidades de medida, señala Galdón Software.
¿Qué es una unidad de medida?
Una unidad de medida (UM) describe cómo se realiza el seguimiento y la gestión de la cantidad de un artículo; las unidades más comunes son «cada», «pieza», «paquete», «metro», «galón» y «palé». Normalmente, los artículos pueden comprarse, fabricarse, almacenarse, presupuestarse, transportarse y venderse en diferentes UM. Por lo tanto, no sólo es necesario que un sistema admita diferentes UM, sino que debe existir una norma para convertir una UM en otra.
Las UM se suelen clasificar en función de su finalidad.
- Inventario: cuantifica las existencias en términos comprensibles para las partes interesadas.
- Coste: se utiliza para calcular los costes de inventario
- Fabricación: se utiliza para gestionar los artículos fabricados y las cantidades de componentes en el proceso de producción, como en una lista de materiales (BOM).
- Compras: la UM en la que se compra un artículo a un proveedor.
- Ventas: la UM en la que se vende un artículo
¿Dónde se utilizan las unidades de medida (UM)?
Las listas de materiales tienen varios usos
- Fabricantes de alimentos que tienen el producto en envases de distintos tamaños, por ejemplo, cerveza vendida en botellas individuales (cada una), paquetes de 6 o cajas.
- Otra UM es el «peso de captura». En este caso, los productores o distribuidores venden un producto por peso; el peso de cada producto puede variar, es decir, no se trata de un peso estándar. Un ejemplo es una empresa que vende pollo, en la que cada pieza de pollo debe venderse por su peso en lugar de por un precio fijo.
- Empresas que compran y venden en unidades diferentes. Por ejemplo, un fabricante de productos metálicos compra acero en planchas (metros), pero lo corta y lo entrega a los clientes en piezas de acero; el mismo producto se vende de forma distinta a como se compró.